Una pequeña cervecera familiar de Alemania, Klosterbrauerei Neuzelle, en el estado de Brandeburgo, acaba de dar con una fórmula que podría revolucionar el mercado: han desarrollado la primera cerveza en polvo del mundo.
De la noche a la mañana han conseguido una notoriedad sin precedentes. “La demanda internacional de cerveza en polvo ya es ininterrumpida y abrumadora”, reconoce Stefan Fritsche, director gerente de la empresa.
El polvo es elaborado a partir de dextrina, malta, lúpulo y levadura aunque, obviamente, la fórmula en detalle se guarda como secreto de Estado. Su preparación es prácticamente instantánea. Mezclando 50 gramos de polvo con medio litro de agua, se agita la mezcla y enseguida se forma la espuma y se obtiene el color tradicional de la cerveza.
¿Y por qué podrían revolucionar el sector? La respuesta es sencilla. Los costes de transporte se reducirían un 95 por ciento y a eso habría que sumar el ahorro en el uso de botellas, latas y cajas, además del problema de agua, la maquinaria de embotellado, el coste de la energía…
Los medios alemanes que han visitado la fábrica aseguran que una botella normal de medio litro de cerveza pesa un kilo, en polvo serían únicamente 45 gramos.
Fritsche apunta que el formato en polvo es la culminación y el desarrollo lógico de muchas innovaciones. “Las ventas anuales de cerveza en todo el mundo ascienden a 450 mil millones de euros que equivalen a 180 millones de toneladas de cerveza. De ellas 160 millones de toneladas son agua pura que hay que transportar”. La apuesta de Klosterbrauerei Neuzelle pasa porque se deje de transportar peso para transportar únicamente sabor.
Todo parece indicar que la solución es perfecta pero falta por conocer la respuesta del consumidor. Por ejemplo, tú. ¿Estarías dispuesto a probar cerveza en polvo?
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