Guinness World Records certifica que un brandy producido en 1696 en la región de Cognac es el más antiguo del mundo

El equipo de Guinness World Records ha certificado que un brandy producido en la región de Cognac por Jules Robin and Company en 1696 es el más antiguo que se conserva en la actualidad. Preservado en una botella de cristal de plomo tallado con el nombre del productor y el año de la cosecha grabados en la base, ha sido cuidadosamente protegido durante 328 años.

El recipiente incluye una base de piedra verde con letras doradas, un vaso grabado y un tapón, todos introducidos en una cúpula de cristal. Esta disposición ha permitido que el conjunto se mantenga en perfecto estado de conservación durante todo este tiempo, según relatan en el portal Vinetur.

En 1696 el rey Luis XIV estaba en pleno apogeo de su poder en Francia habiendo firmado el Tratado de Turín por el que se puso fin a la Guerra de los Nueve Años. Por entonces la industria del coñac ya estaba consolidándose. Este popular licor tiene sus raíces en el siglo XVI cuando comerciantes holandeses visitaban el suroeste de Francia para comprar vino y otros productos. Sin embargo, el vino tenía dificultades para mantenerse fresco durante el viaje de regreso a los Países Bajos lo que llevó a los productores franceses a empezar a destilar el vino dos veces dando origen al coñac.

La botella en cuestión fue entregada por el productor a Edmond Jaulin, uno de los cofundadores de la marca Jules Robin. Eventualmente llegó a una colección privada en Francia durante la década de 1950 y en 2018 fue redescubierta y adquirida por su actual propietario por una suma de dinero no desvelada.

Aunque ya se sospechaba que era el coñac más antiguo, ese estatus ha sido confirmado ahora por Guinness World Records superando al coñac de la casa Gautier, destilado en 1762. Aquella botella se vendió en una subasta en 2020 por casi 150.000 dólares cuando aún era considerado el coñac más antiguo del planeta.